Cuando una mujer avanza no hay hombre que retroceda
El 8 de marzo es una fecha combativa pues las mujeres son el motor de la sociedad y de la historia. En el día internacional de la mujer hay que recordar a las miles de mujeres que han dado sus lagrimas, su sangre, sus familiares y su propia vida al gran ideal: la creación de un mundo mejor.
Son muchas mujeres a las que hay que recordar como la Comandanta Ramona del EZLN, Gloria Arenas del ERPI, Rosa Luxemburgo del PSD Alemán, etc., etc. Aún hay mucho que aprender de las luchas que protagonizan las mujeres como la igualdad de oportunidades, salario igual trabajo igual, jornada en el hogar remunerada, derecho a huelga en el hogar, no al casamiento forzado, derecho a decidir sobre su propio cuerpo, así como también se tiene que levantar la voz en contra del sexismo, a las religiones, a la violencia verbal y física y a la semi-esclavitud en que aún viven muchas mujeres en México, como por ejemplo las damas de compañía de la merced, que son arrancadas del seno hogareño (en especial de Oaxaca) y son mantenidas allí por medio de mentiras, golpizas, amenazas a sus familias y sobornos por parte de sus padrotes y de las autoridades. Debemos recordar en esta fecha que las mujeres son mucho más que busto y vagina, con capacidades de reproducción y orientaciones a ser sirvientas hogareñas sin el pago por su trabajo. “Ni putas Ni sumisas” es el slogan de una organización Parisina “feminista ligth”, en México debemos agregar “y aunque lo fueran no deben ser sumisas”.
Cuántas trabajadoras IMSS (enfermeras, doctoras, dietistas, trabajadoras sociales, asistentes, intendencia, secretarias, etc.) tienen que llegar temprano a casa para atender a sus hijos y “darle de comer” a su esposo, o levantarse temprano para hacer la comida, planchar, lavar trastos, dejar a los niños en la escuela, etc. o en su defecto hacer guardias para poder satisfacer las necesidades y “darle lo mejor” a su ser amado (hijo o esposo) cumpliendo así su rol histórico: la oprimida, la sumisa, la que no dice nada, la que acepta sin cuestionar, en fin que siempre se lleva la friega. Aún existe trabajo por hacer en este terreno y El Sindicato tiene que poner más atención a esta explotación.
Joel Medrano.
domingo, 9 de marzo de 2008
Cuando una mujer avanza no hay hombre que retroceda
Publicadas por
Joel Medrano Mariscal
a la/s
11:59 a.m.
Etiquetas: 8 de marzo, mujeres
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)

No hay comentarios.:
Publicar un comentario